Para especialistas en derechos humanos, esta acción vulnera los derechos de las personas migrantes, pues significaría “un retroceso respecto al derecho de migrar y no migrar».
Por: Norma Ramírez, aportes Josseline Roca/ Foto: PNC
El ministro de Seguridad, Rogelio Rivas, anunció el lanzamiento de las “Patrullas Fronterizas” en la frontera a Hachadura, sieguiendo, dijo, lineamientos del presidente Nayib Bukele. Lo objetivos hechos públicos, que acompañaron el inicio de operaciones de esta unidad, son «eliminar puntos ciegos en las fronteras, combatir la trata y tráfico de personas, contrabando de mercadería, el ingreso ilegal de dinero producto de la actividad criminal y otros ilícitos», afirmó Rivas.
El ministro dijo que serán 300 oficiales de migración y 800 agentes de la División de Seguridad Fronteriza de la Policía Nacional Civil (PNC) quienes estarán al frente de esta iniciativa. Agregó que el personal a cargo recibirá carros patrullas, modernos drones y equipo especializado, financiados por el gobierno de Estados Unidos.
«Vulnera derecho a migrar«
Para especialistas en derechos humanos, esta acción vulnera los derechos de las personas migrantes, pues significaría “un retroceso respecto al derecho de migrar y no migrar», dijo Celia Medrano de la Fundación Cristosal.
Beatriz Campos, Adjunta de Seguridad Ciudadana y de Personas Migrantes de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), señaló que si bien siempre han existido controles migratorios les preocupa que, tanto militares como policías, puedan extralimitarse en sus funciones.
La Procuradora Adjunta dijo que esperan que “no se criminalice la migración”. Sobre todo porque en muchos casos quienes salen o entran del país es para proteger sus vidas o la de sus familias.
Respecto a la participación de policías y militares en estas tareas, Lea Montes, coordinadora del servicio jesuita de Nicaragua, señaló que estos cuerpos de seguridad “no están capacitados” para atender y entender las condiciones de las personas migrantes.
Jordán Rodas, Procurador de Derechos Humanos de Guatemala, acotó que se deben considerar otro tipo de acciones para perseguir a quienes cometen delitos como la trata de personas y el tráfico de ilícitos, que no vulnere a migrantes.
Para Rita Robles, investigadora mexicana, preocupa que el interés que motiva la creación de las patrullas fronterizas sea únicamente económico y que se dejen de lado las condiciones estructurales que provocan la migración. Cuestionó que sea Estados Unidos el que acompañe este proyecto, al ser este un país cuya práctica ha sido de “intervencionismo” en Centroamérica.
El proyecto de patrullas fronterizas es parte de un acuerdo del gobierno con el secretario interino de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kevin McAleenan, funcionario que en los últimos meses ha visitado a varios países centroamericanos para establecer acuerdos que frenen la migración irregular. Las patrullas fronterizas iniciarán funciones en La Hachadura, Ahuachapán, punto fronterizo con el vecino país de Guatemala.
