Por: Observatorio de la Comunicación de ARPAS/Foto:DW

El periódico digital El Faro reveló esta semana que la causa de la matanza realizada por las maras a finales de marzo de este año fue el rompimiento del pacto del gobierno con las principales pandillas. En el reportaje titulado “Audios de Carlos Marroquín revelan que masacre de marzo ocurrió por ruptura entre Gobierno y MS”, el medio investigativo mostró que el asesinato 87 personas perpetrado entre el 25 y el 27 de marzo fue una “venganza de las maras” por el incumplimiento gubernamental de acuerdos que mantiene con estos grupos criminales.

El Faro tuvo acceso a audios de conversaciones que Carlos Marroquín, director de Reconstrucción del Tejido Social del Ministerio de Gobernación, sostuvo con cabecillas de pandillas en el momento en que se realizaba la masacre. El medio digital también entrevistó a miembros de maras que confirmaron “la traición” del gobierno como pretexto para asesinar a casi un centenar de personas en sólo un par de días.

En los audios Marroquín menciona que el gobierno ha mantenido negociaciones con las maras durante casi tres años y admite que él personalmente sacó de la cárcel y trasladó a Guatemala a un cabecilla pandilleril reclamado en extradición por Estados Unidos. Esta es la primera vez que las negociaciones del actual gobierno con las maras son confirmadas por uno de sus funcionarios, quien asegura tener comunicación directa con el presidente Nayib Bukele. Antes El Faro había presentado fotografías, bitácoras y otros documentos del sistema penitenciario, sobre todo de la cárcel de máxima seguridad de Zacatecoluca donde guardan prisión los principales cabecillas de las maras.

Las negociaciones ocultas de este gobierno con las maras fueron reveladas por primera vez en septiembre de 2020, cuando El Faro demostró con documentos del sistema penitenciario que el gobierno llevaba un año negociando con una de las pandillas reducción de homicidios y apoyo electoral a cambio de mejores condiciones para pandilleros encarcelados y ayuda para los que están libres.

“Mil veces malditos”

Estas investigaciones periodísticas muestran, por un lado, que la reducción de asesinatos no es por la efectividad del “Plan Control Territorial”, como dice la propaganda gubernamental, sino por acuerdos del gobierno con los grupos criminales; y, por otro lado, confirman que el gobierno incumplió su promesa de no pactar con pandillas como lo hicieron gobiernos anteriores a los que acusó de “negociar con la sangre del pueblo” y los llamó “mil veces malditos”.

¿Para evitar esto, era la reforma?

La nueva publicación de El Faro sucede en medio de un estado de excepción que va a cumplir dos meses y en el marco el cual la Asamblea Legislativa dominada por el oficialismo aprobó reformas al Código Penal y a la Ley de Proscripción de Pandillas que castigan con penas de hasta quince años de cárcel a quienes publican declaraciones de pandillas y otros mensajes que “las promuevan” o “hagan apología” de éstas.

La Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) y la Mesa de Protección a Periodistas calificaron de censura  y mordaza la referida reforma, pues podrían tener como propósito evitar la publicación de investigaciones periodísticas que desnudaran las inconsistencias e incoherencias en la guerra gubernamental contra las maras.

Lo actuado por El Faro y otros medios investigativos, así como también la labor de los demás medios que informan críticamente sobre los hechos de la realidad nacional, representan el último refugio ante la desolación que constituye la mentira y el autoritarismo que se consolida rápidamente en el país.