//Carta ASGOJU

Carta ASGOJU

San Salvador, 22 de diciembre de 2016.
Profesor Salvador Sánchez Cerén
Presidente de la República de El Salvador
Presente.
Estimado Presidente:
Reciba fraternales saludos de las organizaciones, redes y movimientos que integramos Alianza Social
por la Gobernabilidad y la Justicia (ASGOJU) y nuestro reconocimiento a su labor en la conducción del
gobierno de nuestro país.
ASGOJU surgió hace casi dos años con dos propósitos fundamentales: denunciar las estrategias de
desestabilización de la derecha oligárquica y respaldar los esfuerzos de su gobierno en la búsqueda de
solución a los problemas del país, a fin de ir avanzando en la profundización de los cambios y la
construcción de un país más democrático, incluyente y sustentable.
Es por eso que hemos denunciado el boicot de la derecha al financiamiento gubernamental, a las
medidas de seguridad pública y a los permanentes llamados al diálogo, concertación y búsqueda de
consensos planteados por su gobierno. Así, hemos señalado la oposición siempre destructiva del partido
ARENA, las acciones de desestabilización de la Sala de lo Constitucional, la evasión y elusión
tributaria de los grandes empresarios, etc.
Por eso también hemos respaldado los programas sociales, los planes de seguridad, la política de
transparencia, el incremento al salario mínimo y demás esfuerzos de su gobierno por lograr un país más
justo, equitativo y en el camino de superar las desigualdades estructurales y la exclusión histórica de la
mayoría de la población salvadoreña. Reconocemos y apoyamos esos esfuerzos.
Y en esta condición de organizaciones aliadas estimado Presidente es que ahora le venimos a solicitar
que de manera urgente realice los cambios necesarios en su gobierno. Somos conscientes de que no
sólo ayudamos respaldando sus acciones, si no también señalando errores que deben corregirse.ASGOJU considera urgente un giro en las estrategias políticas y de comunicación, que permitan al
gobierno salir de la posición defensiva, el acoso y arrinconamiento de la oposición. En esta línea, el
gobierno no debe poner sus cartas únicamente en la negociación con la derecha, sino también en una
alianza real con las organizaciones populares, movimientos progresistas, sectores democráticos y toda
la población honrada, para incidir en la correlación de fuerzas que permita resolver problemas como la
crisis fiscal y generar posibilidades de avanzar con cambios más estructurales.
También es necesario un cambio en la orientación de su política económica, que conlleve un
rompimiento real con la lógica neoliberal. Es necesario por ejemplo impulsar un combate firme
contra la evasión y elusión tributaria de las grandes empresas y promover una reforma fiscal
progresiva, en vez de proyectar nuevos impuestos que afecten a la población consumidora y
trabajadora. Las organizaciones estamos listas para apoyarle este esfuerzo.
Además, es oportuno realizar ajustes en su gabinete. Hay que evaluar seriamente el desempeño de
todos/as los/as titulares de ministerios y viceministerios, entidades autónomas y semi autónomas, y
secretarías presidenciales. En instancias como el Ministerio de Hacienda y CEPA los relevos deben ser
inmediatos, y otros como el Ministerio de Economía, ANDA, Ministerio de Medioambiente,
Viceministerio de Transporte y las secretarías Técnica y de Gobernabilidad tienen que ser evaluados
seriamente para decidir su relevo o continuidad.
Esperamos estimado Presidente cambios al cierre de este año, para que en el próximo 2017 su
gobierno inicie con nuevos brillos. Si no lo hace, su gobierno seguirá debilitado y desgastándose ante
una oligarquía que planea arremeter con más fuerza a través de todos sus instrumentos políticos,
gremiales, mediáticos y oenegeros.
Evitar el retorno de la derecha pasa por el éxito de su gobierno, que sólo será posible rectificando
errores y retomando la iniciativa política con mayor conducción, decisión y liderazgo de su parte.
Cuente con nosotros/as, Presidente. Estamos con usted en la lucha por los cambios en favor de la gente
y en la búsqueda de las transformaciones estructurales que el país necesita en lo económico, político,
social, cultural y ambiental.
Rieterándole nuestras consideraciones, nos suscribimos atentamente: