El candidato presidencial de ARENA, Carlos Calleja, presentó hoy a la Asamblea Legislativa una lista de propuestas de medidas para combatir la corrupción. Esto, con el propósito de salir al paso de las acusaciones contra el partido oligárquico de haber recibido dineros públicos provenientes de los robos y malversaciones del ex presidente Antonio Saca.

Preocupado por la caída de 10 puntos en las últimas encuestas (y con el propósito de lavarle la cara al partido oligárquico), el presidenciable arenero propuso eliminar la partida secreta y los gastos reservados o discrecionales de todos los funcionarios públicos, especialmente del presidente de la República.

Acompañado de los diputados de ARENA, PCN y PDC, que integran la alianza de partidos de derecha para las elecciones presidenciales del 2019, Calleja también propuso que todos los gastos del Presidente, diputados y demás funcionarios públicos sean auditados por la Corte de Cuentas, regular los viajes de los funcionariospúblicos y prohibir la asignación de fondos estatales a organizaciones vinculadas a partidos políticos o a funcionarios.

Estamos, evidentemente, ante un acto altamente demagógico de un guión de propaganda barata. Calleja y ARENA se burlan del país y quieren “vernos la cara…”.

Si Calleja y compañía de verdad quisieran combatir la corrupción deberían, como primera medida, reconocer públicamente la corrupción institucionalidad que imperó en los cuatro gobiernos areneros (de Cristiani, Calderón Sol, Francisco Flores y de Tony Saca), y pedir perdón al pueblo.

En segundo lugar, entregar a la justicia a todos ex funcionarios y dirigentes políticos que cometieron esos actos de corrupción, y devolver todo el dinero robado o malversado. Para tener una milésima de credibilidad, ARENA debería devolver -al menos- los 10 millones robados de la donaciones de Taiwán, los 7.6 millones que le entregó Saca y los otros 2 millones de dólares utilizados en la campaña electoral del 2009.

Sólo así, señor Calleja, tendría algo de cara para ir a la Asamblea a presentar las medidas que propuso hoy. Nadie, mínimamente cuerdo y sensato, creerá que usted quiere combatir la corrupción, si busca dejar en la impunidad los escandalosos y obscenos robos, fraudes y malversaciones de los gobierno de su partido.

Lo actuado hoy por el candidato arenero es un acto cínico y electorero, que busca evitar un costo político mayor por los señalamientos de corrupción contra ARENA. Toda la población decente, honrada y honesta debe repudiar tan burdo acto proselitista del presidenciable de las élites oligárquicas del país.

Calleja y quienes le acompañaron hoy son “burros hablando de orejas”.