Los medios hegemónicos, especialmente los canales de Telecorporación Salvadoreña (TCS) y los periódicos La Prensa Gráfica y El Diario de Hoy, en tanto medios orgánicos de la derecha oligárquica, están al servicio de la campaña electoral de la coalición conservadora ARENA/PCN/PDC y su fórmula presidencial Carlos Calleja-Carmen Aída Lazo.
Dos situaciones lo confirman claramente. Una es la estrategia de silencio contra Nayib Bukele. El candidato presidencial de GANA poco aparece en las pantallas y páginas de los referidos medios de (des) información, y cuando aparece casi siempre es en tono negativo.
Bukele es identificado por ARENA como principal adversario; por tanto, los medios de derecha buscan invisibilizarlo y resaltan las críticas en su contra. Así, esos medios, autoproclamados “objetivos, independientes y plurales”, muestran todo su sesgo y parcialidad en favor de partido que representa los intereses de las élites oligárquicas salvadoreñas y las transnacionales.
La otra situación es la invisibilización de los logros del gobierno.
El ejecutivo ha presentado en las últimas semanas significativos avances en salud, educación, seguridad pública e inversiones, resultantes de su políticas; pero poco o nada de esto es difundido por TCS, LPG, EDH y Cía.
Bajo el supuesto que la divulgación de los logros gubernamentales podría favorecer electoralmente a la fórmula presidencial del FMLN Hugo Martínez-Karina Sosa, las televisoras y periódicos areneros ocultan la reducción de los niveles de violencia, los programas de apoyo a jóvenes, nuevos proyectos educativos, entre otros avances importantes.
Lo anterior no sólo evidencia la parcialidad y sesgo político de los medios areneros, sino que también constituye una grave violación al derecho de información de la población. La gente tiene derecho a saber sobre las acciones del gobierno y los resultados de sus políticas, estrategias, planes y programas.
Y esto debería ser observado y reprobado por todos los sectores democráticos, pues la transparencia y equidad de los procesos electorales también requiere medios equilibrados y plurales. Por eso la democratización del país también requiere de la democratización del modelo mediático, para que éste sea diverso, plural y transparente.
Se ve como la incipiente democracia cada día la debilitan más y estas situaciones deben ser denunciadas públicamente por todos los sectores democráticos del país, también sorprende que el fmln calle ante esta situación aún siendo también afectado pero en menor escala.