Diversas organizaciones sociales han pedido a la Asamblea Legislativa hacer modificaciones importantes a la propuesta de presupuesto estatal del próximo año. En este editorial resumimos en tres ámbitos los cambios que los diputados y diputadas deben hacer a la propuesta presentada por el Ejecutivo, si actúan con responsabilidad y en función de los intereses del país.
1. Transparencia, rendición de cuentas y anticorrupción. El presupuesto enviado por el Ejecutivo es oscuro: más de 250 millones de dólares están escondidos en rubros poco claros y no especificados como “gastos financieros”, “gastos diversos”, “gastos varios” y en un mayor presupuesto del Organismo de Inteligencia del Estado (OIE). Estos rubros deben transparentarse y, si el destino de los fondos no es válido, deben ser reasignados; de lo contrario, podrían quedar “partiditas secretas” distribuidas por todo el presupuesto.
2. Distribución de gastos según las necesidades de la gente y las prioridades nacionales. La propuesta del gobierno reduce de 18 a 15 millones los fondos al Ministerio de Medioambiente y Recursos Naturales (MARN), a pesar del grave deterioro ecológico del país; mientras aumenta de 15 a 22 millones el monto para publicidad. Sube en un 18% el gasto de Defensa, mientras elimina programas en Agricultura y reduce otros en Salud, Educación y protección a sectores vulnerables; también quita 9 millones al subsidio del gas propano. La Asamblea debería reasignar montos priorizando más recursos para educación, salud, saneamiento ambiental, prevención de la violencia y demás necesidades urgentes.
3. Justicia tributaria y no más endeudamiento. Para financiar los gastos el gobierno pide 750 millones de más endeudamiento, en vez de plantearse el combate contra la evasión y elusión fiscal que prometió durante la campaña electoral. Los diputados deberían aprobar la Ley de Cobro Coactivo para agilizar la recuperación de la deuda tributaria y hacer reformas orientadas a prevenir la evasión de impuestos que ronda los 1,500 millones de dólares según la UCA, 1,800 millones según OXFAM y más de 2,000 millones según cálculos del propio Ministerio de Hacienda. Además, es necesario especificar los millonarios “ingresos no tributarios” que incluye la propuesta del Ejecutivo.
Con estas tres grandes correcciones, el país tendría un presupuesto más transparente, más acorde a las necesidades del país y financiado sin más deuda pública. Diputadas y diputados, deben “corregirle la plana” al Ejecutivo y no ceder ante las presiones del Presidente Nayib Bukele y compañía, quienes -difundiendo muchas mentiras y “medias verdades” en redes sociales y medios de comunicación- insisten en que los diputados aprueben cuanto antes y sin modificaciones su propuesta de presupuesto.
Ojalá que así sea.