La Alianza contra la Privatización del Agua denunció ayer la estrategia de la derecha parlamentaria para postergar la discusión y aprobación de la Ley de Agua. Ausencia sistemática en las sesiones de la Comisión de Medioambiente y Cambio Climático, creación de una comisión técnica y compromisos demagógicos de no privatizar el agua, son -entre otras- las maniobras de ARENA, GANA, PCN y PDC, para dilatar el tema.

Según la Alianza, la derecha legislativa -que defiende los intereses privatizadores de cañeros, industriales y demás mercaderes del agua- pretende posponer la discusión hasta después de las elecciones, para evitar costos políticos.

Por eso exige que los candidatos presidenciales se comprometan con la no privatización del agua y gestionen con sus grupos parlamentarios la aprobación de la ley que reconoce el agua como derecho, establece un ente rector de políticas hídricas totalmente público y garantiza la participación comunitaria en la gestión del vital líquido.

Este llamado es -especialmente- para Carlos Calleja y Nayib Bukele, candidatos de los partidos que defienden la privatización del agua. Calleja va con la coalición ARENA, PCN y PDC; y Bukele es el aspirante de GANA.

Los representantes de la Alianza señalan que cualquier discurso de favorecer a la población o compromiso de no privatizar el agua que planteen los candidatos, es falaz y demagógico, si sus partidos no aprueban en la Asamblea Legislativa la ley que proponen las comunidades y organizaciones sociales, las iglesias católica y evangélicas, la UCA y la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH).

Ojalá, pues, que Calleja y Bukele presionen a ARENA, GANA, PCN y PDC, para que abandonen su intento de privatizar el vital líquido y pongan los derechos de la población por encima de los mezquinos intereses empresariales que defiende la ANEP. El país entero debe exigir que lo hagan, o castigarlos con el voto.

La semana pasada decenas de miles de personas marcharon hacia la Asamblea para exigir la aprobación de la ley de agua: comunidades, organizaciones populares, feligreses católicos y evangélicos, estudiantes universitarios y población en general exigieron a una sólo voz que la empresa privada quede fuera del ente rector de las políticas del agua.

Calleja (ARENA-PDC-PDC) y Bukele (GANA), deben acatar esa exigencia de pueblo.