Representantes de las iglesias (católica e históricas), la Universidad Centroamericana (UCA) y de la Alianza contra la Privatización del Agua presentaron, ayer, a la Asamblea Legislativa una nueva propuesta de Ley General de Agua, que debería ser aprobada cuanto antes.
En el simbólico, representativo y significativo acto de entrega participaron el Cardenal Gregorio Rosa Chávez, el Arzobispo de San Salvador José Luis Escobar Alas, el Obispo luterano Medardo Gómez, el rector y vice rector de la UCA y miembros/as de organizaciones sociales.
Este consenso social hizo que la mayoría de grupos parlamentarios le dieran iniciativa, lo cual -a su vez- augura respaldos importantes en la seno de la Comisión de Medioambiente y Cambio Climático y en el pleno legislativo. Hace tres años, en marzo de 2017, se juntaron Iglesia, academia y movimiento social, para lograr una ley de prohibición de la minería metálica.
Sin embargo, ahora no será tan fácil, ya que los intereses de los mercaderes del agua son fuertes y pueden finalmente conseguir que la Asamblea promulgue una ley privatizadora. Por tanto, urge la presión social para que las diputadas y diputados no pongan más excusas y aprueben de inmediato la ley presentada por la UCA, las iglesias y las organizaciones.
La propuesta de ley presentada ayer retoma los elementos centrales de la iniciativa original: el acceso al agua, abundante y de calidad, como derecho humano; la gestión pública del vital líquido, a través de un ente rector integrado únicamente por instancias estatales; y la participación ciudadana en la protección y gestión de los bienes hídricos.
Ojalá que esta propuesta sea respaldada de inmediato por el Ejecutivo. Así como presiona por la aprobación de otras propuestas que son de su interés (préstamos para seguridad pública o voto en el exterior), el gobierno de Nayib Bukele debería empujar la Ley General de Agua.
Hasta ahora la Administración Bukele no ha presentado propuesta ni ha respaldado la que promueven las organizaciones, la UCA y las iglesias. El acto de ayer lo obliga al tomar postura, ojalá ésta no favorezca a la empresa privada con la que Bukele se muestra anuente, cercano y complaciente.
Así que, ahora, todas y todos a presionar por la Ley General de Agua. ARPAS, como parte de la Alianza contra la Privatización del Agua, se suma a esta tarea necesaria para asegurar la continuidad de la vida.