Un estudio presentado por la Mesa Permanente para la Gestión de Riesgos (MPGR) refleja las consecuencias de que en El Salvador no exista una visión de género en la atención de las vulnerabilidades, a pesar del marco legal que obliga a la inclusión y participación de las mujeres desde lo local.
Por: Norma Ramírez/ Edición Josseline Roca/ Foto: MPGR
Fenómenos naturales como las lluvias intensas, fuertes oleajes, enjambres sísmicos y sequías prolongadas causan graves impactos ambientales y sociales, sobre todo, en las comunidades en las que la falta de condiciones de vida dignas las vuelve más vulnerables.
Las afectaciones causadas por estos fenómenos provocan consecuencias diferenciadas, siendo las niñas y mujeres las que, usualmente, asumen mayor responsabilidad y un rol estratégico en la reducción de riesgos de desastres.
Este año, la Mesa Permanente para la Gestión de Riesgos de El Salvador (MPGR) presentó la actualización del estudio denominado “Sobre sus hombros”, una investigación que recoge datos y testimonios de mujeres de cinco municipios del país sobre cómo viven ellas las consecuencias de los fenómenos naturales.
En esta se revela que en El Salvador no existe una visión de género del tema. “A pesar que existe un marco legal que obliga a la inclusión y participación de las mujeres desde lo local, todavía no es una realidad, ya que ellas aún siguen luchando por espacios que les permitan tomar decisiones e incorporar sus necesidades en los planes respectivos”, señala.
La investigación fue realizada en el año 2014 y, luego de cinco años, dice Breni Herrera, los datos han variado muy poco.
Además, en la investigación se señala que no existen planes ni presupuestos para disminuir la vulnerabilidad en la que viven algunas comunidades. Y que hay una débil relación con las municipalidades, lo que impide que las inversiones que se hagan (cuando se logran) no consideren las necesidades diferenciadas de mujeres y niñas, como lo confirma Morena de León, de la comisión comunal de protección civil de San Roque, en Mejicanos, San Salvador.
A pesar de la poca atención por parte de las municipalidades e instancias públicas a las necesidades de las comunidades, se destaca como positivo que las oenegés que trabajan en los territorios lo hacen desde un enfoque de género, lo que permite que las mujeres reconozcan y se empoderen de sus derechos.
La actualización del estudio “Sobre sus hombros” fue presentada en el marco del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria que este año estuvo dedicado a las mujeres que realizan esta labor.
