La propuesta del flamante presidente de la Asamblea Legislativa es contraria a la civilidad y representaría un retroceso nacional, pues la pena capital está prohibida en la mayoría de países del mundo. Como bien pregunta el padre José María Tojeira en un artículo reciente de Diario Co Latino, no se sabe si la actuación de este parlamentario de derecha es por ignorancia o demagogia, por troglodismo o irresponsabilidad.
En todo caso, Gallegos es presa de una visión represiva que niega la complejidad del problema delincuencial y la integralidad de las políticas de seguridad pública que deben combinar eficazmente prevención, represión y reinserción. En esta legislatura él ha sido un férreo opositor a la asignación de fondos para la prevención.
A la demagógica propuesta del diputado de GANA, se suma la también trasnochada medida que plantea el partido Fraternidad Patriótica Salvadoreña (FPS). Óscar Lemus, dirigente y candidato a diputado de este minúsculo partido conservador, ofrece el retorno de la extinta Guardia Nacional para que se encargue de la seguridad pública. La historia mordiéndose la cola.
La demagogia y ridiculez de estos candidatos representa uno de los episodios más bochornosos de la presenta campaña electoral. Los miembros de GANA y FPS deberían hacer un mínimo esfuerzo para pensar propuestas serias, viables y coherentes con la complejidad de problemas como la violencia.
Señores Gallegos y Lemus: sean responsables y respeten la inteligencia, sentido común y dignidad de la gente. Para ilustrarse deberían revisar el Plan El Salvador Seguro (PESS) que contiene propuestas integrales sobre prevención de violencia, persecución del delito, rehabilitación y reinserción de delincuentes y atención a las víctimas de la violencia.
Ojalá que la población repudie propuestas falaces y premie con su voto las que representan medidas de solución reales, viables y consecuentes con soluciones integrales a los problemas que afectan a la población. Que así sea.