La juventud del FMLN se pronunció, en el marco de la conmemoración de la firma de la paz, sobre los temas que consideran necesarios para el debate dentro del instituto político. “El reconocimiento de los logros estaría vacío si no somos capaces de reconocer todos los errores y fracasos que nos hicieron perder la confianza del pueblo”, señalaron.

En el marco de la conmemoración del 28 aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz, la dirección joven del FMLN exhortó a su partido a retomar el trabajo político desde las bases. Cuestionaron que durante las dos gestiones de su partido en el gobierno no se impulsaron cambios estructurales en temas como política, economía y cultura.

Jasael Torres, secretario nacional de juventud del FMLN, afirmó que frente al contexto político que provocó el cambio de gobierno el año pasado, es un reto para su partido reconstruirse pero esto, señaló, debe ser “desde las bases y con una mirada plenamente colectiva, revolucionaria, popular y de integración colectiva”.

Agregó que “los gobiernos del FMLN no fueron capaces de satisfacer la aspiración del pueblo de una transformación profunda y contundente de lo político, económico, social y cultural. En pocas palabras no construimos poder popular”.

La dirección joven del partido izquierdista también cuestionó que la fracción legislativa de su partido resulte mencionada por las contrataciones de algunos trabajadores en la Asamblea Legislativa.

“Reiteramos el llamado a que nuestra fracción legislativa revise de manera autocrítica su planilla de empleados. Altos salarios de empleados legislativos muestran una clara separación económica y cultural con la clase trabajadora”, dicen en su pronunciamiento.

Además, señalan que frente al contexto político actual el partido de izquierda solo tiene dos opciones. “Una es dejarse vencer por los errores cometidos y cederle su espacio a las fuerzas afines al bloque de derecha. O asumirlos y empezar el necesario camino de reconstruir esa moral revolucionaria y volver a ser el referente de las luchas populares de las y los salvadoreños”.

“Una izquierda solo puede considerarse como tal, si es capaz de romper con esas relaciones y empoderar al pueblo para que se convierta en el conductor de su propio destino”, agregan.

Durante los dos gobiernos del FMLN, de 2009 a 2019, diversas voces de las organizaciones sociales cuestionaron la falta de escucha a las críticas por parte de quienes conducían el partido de izquierda, el distanciamiento con las bases populares, así como el diálogo establecido con sectores empresariales.