Durante esta fase las medidas, aseguró el titular del Ministerio de Salud, estarán priorizadas en “mitigar” los impactos del COVID-19. Recomiendan a la población mantener la calma y continuar con las prácticas de prevención, como el lavado constante de manos.
Por Norma Ramírez/Foto: Secretaría de Prensa de la Presidencia
El Gobierno anunció que el país ha pasado a la fase 3 de la pandemia de COVID-19, lo que implica «cambios en los protocolos de atención». Esto quiere decir, según explicó el ministro de Salud, que el virus está circulando “en el más alto nivel” en todo el país.
Según Francisco Alabí, todas las actividades del sistema de salud estarán enfocadas en “mitigar” los efectos de la enfermedad.
El titular del MINSAL explicó que las medidas de la fase 3 consisten en que se realizará manejo de cuarentenas domiciliares para pacientes sospechosos, asintomáticos o con síntomas leves. Además, la atención hospitalaria se priorizará para casos intermedios o críticos.
Francisco Alabí manifestó que con éstas medidas se busca «descongestionar el sistema de salud». El funcionario sostuvo que -si bien la población no debe preocuparse-, se recomienda que las medidas de prevención se mantengan.
El gobierno mantiene a disposición el número 132 para que la población pueda llamar si presenta síntomas de COVID-19.
Según la última actualización de la plataforma oficial de información, hay un total de 2,278 casos de COVID-19. De éstos, 1219 están activos, 42 personas fallecidas y 1,015 casos recuperados.
El Foro Nacional de Salud cuestionó la implementación de cuarentenas domiciliares debido a que consideran que éstas no han tenido una gestión adecuada.
Esta organización exige que para el manejo efectivo de la pandemia por COVID-19 es necesaria mayor inversión en el sistema de salud, contraloría ciudadana y participación comunitaria.