p<>. Sin embargo, el canal estatal tiene algunos retrocesos en su proceso de consolidación como medio público. Esto se evidencia con la exclusión de voces críticas en los espacios de opinión: miembros de organizaciones progresistas han sido proscritos por haber expresado críticas a algunas acciones u omisiones del gobierno.
Por ejemplo: representantes de la Alianza Social por la Gobernabilidad y la Justicia (ASGOJU) fueron vetados en la entrevista “Agenda Ciudadana” después de presentar una carta en Casa Presidencial exigiendo cambios en algunas políticas económicas, estrategias políticas y en la integración del gabinete. La proscripción es también en ciertos medios orgánicos del gobernante FMLN.
Lo anterior constituye un acto de inmadurez política, intolerancia a la crítica y violación a la libertad de expresión cometido por quienes ordenaron vetar a organizaciones aliadas del mismísimo gobierno.
El gobierno del Presidente Salvador Sánchez Cerén, específicamente la Secretaría de Comunicaciones, debe corregir esta actuación impropia de un gobierno democrático y de izquierda; y al mismo tiempo impulsar como política pública la institucionalización de Canal 10 y demás medios gubernamentales como medios públicos pluralistas e independientes del gobierno de turno.
Si el actual gobierno no convierte los medios gubernamentales en medios públicos, éstos serán instrumentos de propaganda de la derecha oligárquica si ARENA retoma el Ejecutivo en el año 2019 y no habrá más espacio para organizaciones sociales, la academia y otros actores nacionales.
Por eso la Red por el Derecho a la Comunicación (ReDCo) plantea su la “propuesta de política pública de comunicación -presentada en enero de este año a la Secretaría de Comunicaciones y a la SIGET – la necesidad de crear un sistema de medios públicos. Para esto urge retomar la propuesta de Ley de Medios Públicos que duerme el sueño de los justos en la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales de la Asamblea.
Ojalá que la celebración del 53 Aniversario de Canal 10 incluyera una reflexión sobre la pertinencia y urgencia de la institucionalización de los medios públicos.